Un vaso de whisky, un hotel diferente,
es más que suficiente para pensar en ti.
Una noche de mayo, con el mar a mi lado,
es ya tarde y tus ojos siguen allí.
Y es que son ideales para perderse en ellos,
...y es que uno no aprende ni vivo ni muerto;
son las seis de la tarde,
toco enfrente del puerto,
y no consigo sacarte de mí ni olvidarme de ti.
Y es que no hay droga más dura
que el amor sin medida.
Es que no hay droga más dura que el roce de tu piel.
Y es que no hay nada mejor
que tener tu sabor corriendo por mis venas.
Nada mejor que el roce de tu piel....
Revolver.